La cita en la Plaza de Luceros de este miércoles ha aglomerado a cientos de alicantinos en una mascletà “atómica, mecanizada y digital”, tal y como la ha descrito el gerente de Zarzoso. El espectáculo ha durado 6 minutos y 6 segundos y ha utilizado 135,86 kilos NEC con un ritmo alto de principio a fin con un compás perfecto y un final apoteósico. La mascletà, se ha abierto paso con los tradicionales truenos de cortesía y 50 metros de traca valenciana. A ello, se han sumado hasta cuatro retenciones aéreas que también han albergado truenos de aviso. A su vez, se ha sucedido efectos visuales de serpentinas, silbatos, zumbadoras, sirenas y el colorido tampoco ha faltado a la fiesta de la pólvora, cogiendo desprevenidos a todos los curiosos que ha asistido y se han arremolinado en torno a la Plaza de los Luceros, que no han podido evitar sentir vibrar el suelo bajo la pirotecnia castellonense.El grueso de la mascletà, ha llegado tras un nuevo estruendo que ha avisado al público de que lo mejor estaba por suceder. Así, el estruendo se ha estado formando por cinco retenciones terrestres junto a un aéreo, con silbatos, serpentinas y nuevos truenos de aviso. Cuando ha culminado la quinta retención, un “espectacular” terremoto, en palabras del alcalde Luis Barcala, ha puesto al límite a todos los asistentes que han sucumbido a la emoción del disparo. El desenlace ha estado compuesto por cinco pasadas y 2.000 truenos. Hasta 300 truenos han sido los encargados de avisar y finalmente han cedido ante un aéreo terrestre digital con el que que la cuarta mascletà del concurso de Luceros ha puesto el broche de oro con dos golpes de trueno de aviso al unísono.Así, queda marcado el disparo de hoy en la edición de este año y deja a los alicantinos expectantes ante la quinta sesión del concurso la protagonizará que tendrá lugar mañana a la misma hora y que irá bajo la firma de la Pirotecnia murciana Hermanos Ferrández.