Las primeras actuaciones de la estrategia de renaturalización de Alcoy han empezado con la eliminación de especies exóticas y la limpieza de las diferentes zonas donde se van a implementar mejoras en los barrancos y cauces de los ríos que atraviesan la ciudad.
Uno de estos trabajos, correspondientes a la actuación B2, que se desarrolla en el tramo urbano del Barranc del Cint, ha empezado en torno al manantial de El Xorrador, un punto de agua que se va a restaurar medioambientalmente y con actuaciones en el tramo del barranco que va hasta el principio de La Vaguada.
Precisamente, los trabajos de limpieza y desbroce que se desarrollarán hasta el próximo 18 de julio en este último punto, concretamente alrededor del puente de Rafael Terol, han obligado a cortar temporalmente por seguridad la circulación de peatones y bicicletas en el tramo de Vía Verde colindante.
También está previsto que arranquen ya las actuaciones que afecta al barranco del Serpis y al cauce del río Barxell (en concreto, las acciones B1, B6, B7 y B8 del proyecto). La primera intervención, en el Barranc del Serpis, permitirá la restauración ecológica de una zona degradada y no accesible con graves problemas de erosión mediante la introducción de especies autóctonas, generando un corredor natural y mejorando la movilidad y la accesibilidad con la creación de una senda ahora inexistente.
Antes, no obstante, se deberá desbrozar la zona, retirando las especies invasoras como el ailanto y las cañas. Estas acciones de limpieza van a empezar a la altura de la residencia de ancianos de la Zona Norte en los próximos días.
Por último, se empezará a trabajar también durante estas primeras semanas de julio en el área del Barranquet de Soler, donde está previsto crear una zona de educación ambiental (Acción B4) y un arboretum urbano que acerque la vegetación autóctono a los ciudadanos, con zonas de descanso y señalización didáctica. Se llevará a cabo la consolidación y recuperación de los taludes existentes, así como la restauración de la vegetación de ribera.
Según apunta la concejal de Transición Ecológica, Teresa Sanjuan, “todas estas actuaciones deben empezar con la limpieza del terreno y la retirada de especies exóticas. Aunque nos hayamos acostumbrado a su presencia, estas plantas invasoras suponen un desequilibrio para el ecosistema local. Eliminarlas es clave para sustituirlas por especies autóctonas que impulsen la biodiversidad y aumenten la resiliencia de nuestro entorno natural”.