El Ayuntamiento de San Vicente estrenará en 2026 un nuevo contrato de limpieza viaria y recogida y tratamiento de residuos sólidos urbanos. La renovación en la gestión de estos servicios municipales seguirá adelante tras rechazar el Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales la petición de nulidad presentada por dos mercantiles, asociadas en UTE, contra el acuerdo de adjudicación a favor de la empresa Prezero que se aprobó en el pleno de septiembre.
La resolución, de carácter definitivo e inapelable por vía administrativa, autoriza a su vez levantar la suspensión cautelar del procedimiento de contratación, que seguirá su curso para proceder a su formalización definitiva a principios del próximo año. Tras examinar todos los trámites realizados desde el Ayuntamiento, paso a paso, desde este tribunal se ha validado el proceso técnico de evaluación, valoración y puntuación de las ocho ofertas presentadas para la gestión de estos servicios y ha desestimado el recurso interpuesto por una de las concursantes.
El alcalde, Pachi Pascual, ha celebrado “esta gran noticia que permitirá que entre en vigor este contrato, tan necesario para todos los sanvicenteros, para que podamos tener un servicio acorde a lo que merece una población en la que residen más de 60.000 habitantes y cumplir así el compromiso adquirido con la ciudadanía en el que hemos trabajado desde el primer día”.
Tras el periodo de implantación necesario, el primer edil ha recalcado que “se van a empezar a ver mejoras en la limpieza y en la recogida de residuos, pero también en materia de concienciación ciudadana, algo fundamental para que podamos tener la ciudad que todos queremos”.
El contrato fue adjudicado el pasado mes de septiembre con el respaldo del pleno por un importe de 85 millones de euros distribuidos entre los 10 años de vigencia, hasta 2036, con los votos a favor de PP y Vox. Este acuerdo se ha mantenido suspendido mientras se resolvía el recurso presentado, lo que ha llevado al equipo de Gobierno a aprobar la octava prórroga forzosa hasta mayo de 2026 del anterior contrato, adjudicado en 2012 para un periodo inicial de 8 años que se han alargado 5 más. Esta prórroga quedará suspendida con el inicio del nuevo contrato.
El alcalde ha reconocido “la enorme implicación y esfuerzo realizado por muchos trabajadores de este Ayuntamiento tanto para preparar un contrato con muchas mejoras y todas las garantías legales, como para adjudicarlo y hacer frente a la suspensión cautelar, que ha complicado la situación en los últimos meses, pero, afortunadamente, ha tenido un final feliz para todos los ciudadanos, que somos los grandes beneficiados de este proceso”.
Pascual también ha agradecido el trabajo de los empleados responsables de la recogida de residuos y limpieza de la ciudad “que han hecho lo posible por dar un buen servicio a la ciudad y, en adelante, dispondrán de más recursos y mejor gestión para cumplir los estándares de calidad exigidos y de una mayor colaboración de la ciudadanía que esperamos lograr con las campañas de concienciación previstas”.
En 2026, además del nuevo contrato, el equipo de Gobierno de San Vicente ha impulsado nuevas reducciones de la tasa por la recogida, transferencia y tratamiento de residuos dirigidas a beneficiar a alrededor de 1.800 familias en situación vulnerable a partir del próximo 1 de enero.
También por primera vez se establecerán dos reducciones que premian la colaboración ciudadana de hasta un 4% por depósitos en el ecoparque y hasta un 16% por depositar residuos orgánicos en los contenedores inteligentes que se irán implantando en un periodo de hasta 18 meses a partir del inicio del nuevo contrato.
Mejoras previstas
La resolución del Tribunal de Recursos Contractuales conocida en las últimas horas permitirá adelantar la entrada en vigor de las mejoras previstas con el nuevo contrato. Entre ellas figuran, en materia de residuos, la implantación de la recogida de bioresiduos y contenedores inteligentes para restos orgánicos, incrementar la eficiencia y optimizar los recursos, potenciar las recogidas selectivas o evitar desbordamientos y retirar de forma rápida y eficiente los diferentes residuos, incluidos los voluminosos.
Se recoge también el compromiso de mejorar la limpieza, especialmente en parques, jardines, plazas, zonas de juegos infantiles, pavimentos, mobiliario urbano o fachadas de edificios públicos, y el control y evaluación del cumplimiento del contrato. Otra de las novedades anunciadas es la flexibilidad para adaptar los trabajos a las necesidades que surjan hasta el final del contrato.
Para acometer los cambios previstos, el gasto anual se incrementará un 72,3% en limpieza, pasando de 2,3 a 4 millones de euros por ejercicio, y un 17,76% en recogida de residuos, que crece desde los 3,77 a 4,4 millones anuales.