Un hombre ha sido condenado por el Juzgado de Instrucción número 1 de Elche por propinarle una patada en la muñeca a una cuidadora felina mientras trataba de alimentar a un gato de la calle. La mujer trabajaba como gestora de una colonia felina y tenía autorización del consistorio municipal para alimentar a los animales.Ahora, el hombre ha sido acusado por este órgano judicial por un delito leve lesiones y deberá pagar una multa de 150 euros. Una sanción que si el acusado no paga se sustituirá por quince días de privación de libertad. Además, deberá pagar a la mujer a la que agredió 269,85 euros en concepto de responsabilidad civil.Aparte de la multa y el pago a la cuidadora por los daños sufridos, la institución judicial también ha interpuesto al acusado una orden de alejamiento de la cuidadora. De esta manera, el hombre no podrá acercarse a una distancia de menos de 100 metros de la víctima y también tiene prohibido comunicarse con ella por cualquier medio durante un periodo de tres meses.Los hechos ocurrieron el pasado día 29 de julio cuando, entorno a las 8 de la mañana, dos mujeres (que eran cuidadoras felinas de esa colonia) estaban poniendo agua a uno de los gatos cuando el hombre, que es propietario de un restaurante costero de Santa Pola, se dirigió a ellas "de forma exaltada" y les dijo: "Aquí es un restaurante, se cagan y mean los gatos, no podéis poner nada al gato, voy a llamar a la Policía".A pesar de que ambas mujeres tenían una autorización del Ayuntamiento de Santa Pola para alimentar y dar agua a los gatos, el hombre le propinó a una de ellas una patada en la muñeca derecha que le causó, según detalla el informe forense, una contusión y dolor por el que recibió atención sanitaria.