Han pasado 33 años, pero la espera ha merecido la pena. El Horneo EÓN ha logrado lo que parecía un sueño lejano: devolver a Alicante a la élite del balonmano nacional. El equipo de Fernando Latorre ha firmado una temporada para la historia, culminada con el ansiado ascenso a la Liga Asobal, la máxima categoría del balonmano español. La ciudad, volcada con este hito deportivo, celebra con orgullo el regreso de uno de sus deportes más emblemáticos al lugar que le corresponde.
Recepción oficial en el Ayuntamiento
Como muestra de este reconocimiento, el Ayuntamiento de Alicante ofrecerá este martes, a las 13:30 horas, una recepción oficial al equipo en el Salón Azul, donde el alcalde Luis Barcala homenajeará a los protagonistas de este éxito deportivo. La cita institucional pondrá el broche de oro a un fin de semana de celebraciones compartidas entre plantilla y afición.
De hecho, Barcala ya participó este domingo por la tarde en la primera gran celebración a las puertas del pabellón Pitiu Rochel, donde los jugadores fueron recibidos con cánticos, música de batucada y una atmósfera de auténtica fiesta. Allí, el primer edil felicitó públicamente a todos los implicados en el ascenso: “Quiero daros la enhorabuena a los jugadores, cuerpo técnico, directiva y afición porque habéis devuelto a esta ciudad la pasión por el balonmano, seguramente el deporte de equipo que más gloria y alegrías ha dado a Alicante”.
“Ahora toca mantenerse”
Barcala, acompañado por el concejal de Deportes, Toni Gallego, también quiso lanzar un mensaje de continuidad: “Habéis trabajado mucho, con tesón y esfuerzo, para alcanzar este logro, pero hay que seguir trabajando ahora porque lo difícil no es llegar, sino mantenerse”.
Durante el acto, también intervinieron el presidente del club, Jaime Cremades; el capitán, Ander Torriko; y el entrenador Fernando Latorre, quien subrayó que “la constancia ha sido una de las claves de este éxito y debe seguir siendo uno de nuestros pilares para afrontar este nuevo gran desafío de la Asobal”.