El Ayuntamiento de Alicante ha presentado un plan para ampliar significativamente el estacionamiento regulado en la ciudad, tanto la zona azul como la zona naranja. Una medida que el equipo de gobierno explica que está destinada a "solventar los problemas existentes en materia de aparcamiento", especialmente en los barrios con mayor dificultad. De aprobarse el proyecto, cuyo estudio de viabilidad se encuentra en periodo de exposición pública, Alicante pasará de 1.873 plazas reguladas a un total de 7.808.
Actualmente, de las plazas existentes, 1.121 corresponden a zona azul básica, 216 a media estancia, 78 a zona comercial y 458 a zona naranja. La ampliación de las nuevas zonas reguladas sería gradual con un incremento progresivo en dos fases. En primer término se añadirán 3.077 nuevas plazas, alcanzando un total de 4.959 estacionamientos regulados. En la segunda fase, se sumarán 2.849 plazas más, llegando al objetivo final de estacionamientos sujetos a pago por tiempo limitado.
La distribución de estas plazas incluye zonas hasta ahora exentas de regulación, como Oliveretes-San Francisco, Mercado, Centro Tradicional, Diputación, Séneca, Alipark, Benalúa, Benalúa Sur, Princesa Mercedes, San Blas, Campoamor-Altozano y Carolinas Bajas. Sin embargo, el estudio no detalla aún cuántas plazas se asignarán específicamente a la zona azul o naranja en cada barrio, un aspecto que ha generado críticas desde los sectores políticos de la oposición, así como de las asociaciones vecinales.
El concejal de Movilidad Urbana, Carlos de Juan, explica que “todavía se puede hablar del número concreto de plazas de nueva creación ya que serán los estudios técnicos y los análisis finales los que determinen la cantidad de plazas a implantar, la tipología, los barrios y los periodos de dicha implantación, siempre velando por los intereses de los residentes, comerciantes y trabajadores de la contrata actual".
Nuevas tarifas y cambio en los horarios
Uno de los aspectos más polémicos del plan es la eliminación de la franja gratuita a mediodía en la zona azul, que hasta ahora permitía estacionar sin coste entre las 14:00 y las 16:00 horas. Con la nueva normativa, en proceso de estudio, el horario será continuo de 9:00 a 20:00 horas de lunes a viernes, y de 9:00 a 14:00 horas los sábados. Para la zona comercial, el horario se extenderá hasta las 20:00 horas los sábados.
Por su parte, el horario en la zona naranja será de 9:00 a 20:00 horas de lunes a sábado para visitantes, mientras que los residentes podrán estacionar sin coste durante el mismo horario, tal y como ha adelantado el Ayuntamiento. Esta gratuidad sustituye a la tarifa de 30 céntimos diarios que se cobraba hasta ahora, y el tiempo máximo de estacionamiento se amplía de una hora a dos. Por otro lado, en la zona azul, el tiempo máximo de aparcamiento también se incrementaría, pasando de dos horas a dos horas y media.
El concejal de Movilidad Urbana aclaró durante una comparecencia tras la Junta de Gobierno que la intención de ampliar este número de aparcamientos regulados es facilitar el estacionamiento “en los barrios más tensionados”. Además, explicó que el permiso para aparcar de forma gratuita se extenderá a las áreas colindantes para garantizar el aparcamiento. "Es importante resaltar que su aplicación no solo será para los barrios de cada vecino, sino que van a poder ser compartidas con las zonas adyacentes", señaló.
Otra de las novedades destacadas que se integra en el plan de la ORA es la regulación de las motocicletas, que a partir de ahora deberán estacionar en espacios específicos dentro de las zonas azul y naranja y pagar el ticket correspondiente. Según explicó Carlos de Juan, esta medida se contempla para evitar lo que considera como una “invasión de motos" en las áreas destinadas a otros vehículos y “optimizar “el uso de las plazas disponibles.
En el caso de los coches eléctricos, el estudio de viabilidad que todavía debe aprobarse de forma definitiva, posiblemente en el primer trimestre de 2025, se plantea una reducción en las tarifas, mientras que los vehículos de personas con movilidad reducida (PMR) tendrán gratuidad total en todas las zonas de aparcamiento regulado. En total, el Ayuntamiento estima que esta ampliación multiplicará por cuatro los ingresos, llegando hasta los 8,1 millones de euros anuales recaudados.
Rechazo de la oposición
La portavoz del grupo municipal socialista, Ana Barceló, critica que el equipo de gobierno haya presentado una propuesta que "triplica las plazas de aparcamiento de pago en la ciudad, elimina la gratuidad a mediodía y no garantiza suficientes plazas de residentes para cubrir la demanda a los barrios en los que se pretende extender la iniciativa". Además, recuerda que no se ha concretado cómo se dividirán las nuevas plazas entre zona naranja y zona azul y, por tanto, "no se ha presentado ningún informe económico".
Por su parte, Rafa Mas, portavoz de Compromís, es todavía más contundente y expresa su rechazo frontal a la medida, alegando que "Alicante necesita soluciones de movilidad, no más plazas de pago". El líder de la formación valencianista aboga por la creación de aparcamientos disuasorios públicos en los barrios y la ampliación de zonas peatonales como “alternativas para mejorar la accesibilidad y la movilidad urbana en la ciudad”.