Una leyenda inventada convertida en una tradición divertida en las calles de Villena. La historia cuenta que durante la visita de los Reyes Católicos en 1488 se produjo una disputa en el mercado semanal entre verduleras de Villena y otras procedentes de Aragón y Castilla. Así, la discusión acalorada acabó en una batalla campal a lechugazos. La idea sobre los recaudadores de impuestos y comerciantes es ahora uno de los espectáculos imprescindibles en las Fiestas del Medievo de Villena: La Lechuguina.El popular barrio de El Rabal, en el corazón de esta localidad alicantina, se trasladará durante el fin de semana a la época medieval. Y en la mañana del domingo 10 de marzo se convertirá en el escenario de una contienda en la que únicamente se podrá morir de risa. El intenso color verde de las hojas de lechuga será el único arma en la que más de 2.000 personas ataviadas con atuendos de la época harán volar cientos de kilos de esta hortaliza de un bando a otro a las puertas del Castillo de la Atalaya. Esta actividad que combina diversión, tradición y un toque absurdo reúne cada año a miles de personas y visitantes para disfrutar de una experiencia única y singular. Sin duda, se trata del espectáculo estrella y en el centro de atención en un fin de semana repleto de actos y propuestas enmarcadas en las Fiestas del Medievo de Villena. Por supuesto, los proyectiles utilizados son las hojas exteriores de las lechugas, el material de desecho antes de envasar esta verdura para los supermercados. Una vez ambos bandos se encuentren frente a frente en la pintoresca explanada de la fortaleza de Villena, entorno a las 12:20h del mediodía, la diversión aflorará a raudales con esta particular batalla campal de lechugas. Sin duda, una forma diferente y especial de celebrar las Fiestas del Medievo que nunca dejan indiferente a nadie, sea o no la primera vez que te dejas llevar por la vorágine de esta tradición.