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La cadena Popeyes abre un nuevo restaurante en la provincia de Alicante

Con la inauguración de este local, la compañía suma ya 9 establecimientos en Alicante y 20 en toda la Comunitat Valenciana

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popeyes alicante
El pollo crujiente de la cadena de restauración Popeyes, que aterrizó en España a finales del año 2019, continúa con su proceso de expansión y añade un nuevo local a su lista de establecimientos. Así, con la apertura de su primer restaurante en la localidad alicantina de Torrevieja consolida su presencia en la Comunitat Valenciana, siendo su vigésimo establecimiento y convirtiéndose en el segundo territorio nacional con más restaurantes sólo por detrás de la Comunidad de Madrid.El nuevo local, ubicado en el Centro Comercial de Torrevieja, está equipado con sistema de autorelleno de bebidas, autopedido, wifi gratuito, servicio para llevar y la opción de recoger pedidos desde el coche, así como el envío a domicilio a través de su plataforma de reparto propia. Un sistema que desde la compañía apuntan que permite “garantizar la máxima calidad del producto y mantener el control de todo el proceso, desde la elaboración hasta la entrega”.En este sentido, Popeyes crea así su noveno local en la provincia de Alicante y tras su apertura ya ha generado treinta puestos de trabajo directos, que se suman a los más de 600 en toda la Comunitat Valenciana. “Con esta nueva ubicación estamos ansiosos de fusionar nuestros sabores únicos con la rica mezcla de cultura, historia y ambiente costero que proporciona Torrevieja”, comenta Yvette Altet, directora de marketing de la compañía.

Raíces de Louisiana con producto nacional

La especialidad de la cadena es el pollo, inspirado en los sabores típicos del estado de Louisiana. Popeyes explica en un comunicado que “priman la calidad” desde las materias primas a la elección de proveedores y al proceso de elaboración y la trazabilidad de toda la cadena de suministro. De este modo, la compañía apuesta por un “nuevo concepto” de comida rápida y cocinado lento. La empresa se mantiene fiel a sus raíces, pero tras su llegada a España ha añadido a su menú pollo fresco 100% nacional que proviene de granjas ubicadas en Castilla y León, Navarra y Cataluña, y que se marina durante 12 horas en una mezcla de especias cajún. Además, los chefs de la marca rebozan cada pieza a mano en el restaurante para mantener los estándares de calidad y ofrecer al consumidor su característico producto “crujiente por fuera y jugoso por dentro”.