El Ayuntamiento de Mutxamel ha puesto en marcha un estudio urbanístico que podría redefinir el paisaje del municipio. El análisis se centrará en las densidades edificatorias de las zonas del Ensanche y el Casco Urbano con el objetivo de evaluar la viabilidad de aumentar la altura permitida en las nuevas construcciones para facilitar la edificación de viviendas en bloque, una tipología que hasta ahora no es posible en ciertas áreas.
Este estudio, aseguran fuentes municipales, se enmarca dentro de las acciones del consistorio para impulsar la construcción de viviendas de obra nueva en Mutxamel, tanto del sector privado como en el ámbito público. En este sentido, el Ayuntamiento también ha anunciado en un comunicado su adhesión al Plan VIU de la Generalitat Valenciana, mediante el cual se busca allanar el acceso a la vivienda de protección pública.
Por otro lado, el consistorio también ha avanzado el desbloqueo del sector ‘Colada Cantalar', situado al sureste del casco urbano. Esta área, cuya gestión inicial privada no prosperó, ha pasado a ser administrada directamente por el Ayuntamiento, permitiendo desde este momento la concesión de licencias de construcción. Actualmente, la redacción del proyecto de obras se encuentra en su fase final, por lo que se espera que salga a licitación en breve.
Evaluación urbanística
Tal y como ha explicado el departamento de urbanismo del Ayuntamiento de Mutxamel, el estudio analizará diversos factores técnicos para determinar si es viable modificar la normativa urbanística para construir más plantas en los nuevos edificios. Entre los aspectos a considerar se encuentran el ancho de las calles, la remodelación de volúmenes, los áticos retranqueados, los coeficientes de aprovechamiento y la posible generación de excedentes.
Además, las mismas fuentes apuntan a que también se tendrá en cuenta el impacto que un eventual incremento en la altura de los edificios podría tener sobre la estructura urbana y la movilidad en la zona. El concejal de Urbanismo, Vicente Gomis, ha explicado que la finalidad del estudio es establecer una base técnica que permita, en caso de que los resultados sean favorables, una modificación normativa “fundamentada”.
Así, el edil señala que “es necesario estudiar todos los parámetros urbanísticos para garantizar que cualquier cambio en la edificabilidad sea sostenible y beneficioso para el municipio". Por su parte, el alcalde de Mutxamel, Rafael García, ha subrayado que estas medidas reflejan el compromiso del consistorio con el desarrollo urbanístico de la localidad. "Estamos trabajando en soluciones viables y efectivas para garantizar que Mutxamel continúe avanzando en materia de vivienda y urbanismo", ha afirmado.
Impulso a la construcción
Dentro de las estrategias municipales para favorecer el desarrollo urbanístico, el Ayuntamiento ha dispuesto una parcela de suelo público a la Generalitat Valenciana para la construcción de viviendas sociales en Mutxamel. En paralelo, esta medida se complementa con la intención de subastar varias parcelas municipales destinadas a vivienda unifamiliar adosada, cuya tipología no se ajusta a los objetivos actuales de desarrollo urbanístico.
De esta manera, el Ayuntamiento utilizará parte de los ingresos obtenidos para adquirir terrenos adecuados para promover edificaciones en bloque para uso público. Además de la planificación, se han implementado diversas bonificaciones fiscales para incentivar la promoción de viviendas. Entre ellas, destaca una reducción del 95% del impuesto sobre construcciones, instalaciones y obras para los proyectos que declarados de especial interés.
También se aplican bonificaciones del 90% para las obras en el casco antiguo y del 50% para viviendas de protección oficial o equivalentes. Por último, para aquellas viviendas o locales que quieran ejecutar mejoras de accesibilidad o habitabilidad de personas discapacitadas también se establece una bonificación del 90%.