La apuesta de todos los actores implicados en materia turística en la provincia de Alicante, tanto instituciones como sector privado, pasa por poner el sello de calidad a la oferta del destino. Esa fue una de las premisas que surgió en el primer Fòrum de Proximitat entre À Punt y Alicante Extra celebrado ayer en la capital alicantina. En este encuentro se trató sobre el presente y el futuro del turismo en la provincia y para el director del Patronato de Turismo Costa Blanca, José Mancebo, el concepto de calidad no debe ir tan solo asociado a la oferta de ocio, actividades o servicios, sino también a la movilidad y conectividad.El responsable turístico de la Diputación de Alicante puso el foco, principalmente, en el flujo aéreo, que considera un “vector clave” ya que el aeropuerto Alicante-Elche volverá a romper la barrera de los 15 millones de pasajeros este 2023. “Tenemos el único aeropuerto nivel 1 de toda Europa que no está conectado por vía ferroviaria con el destino. La falta de conexión con el sur de la provincia es incomprensible, pero también con las dos marinas que reciben un gran número de población turística. Tenemos una conexión de tren que podría ser considerada de vapor y esto se tiene que resolver”, esgrime Mancebo.Para el director del Patronato Costa Blanca la solución pasa por la puesta en marcha de la estación intermodal de Alicante, así como del corredor mediterráneo. “Hay infraestructuras que se deben planificar de arriba a abajo, y ya hemos perdido demasiado tiempo”, califica. En este sentido, el pilar de la movilidad parece uno de los grandes retos futuros de un sector que representa el 14% del PIB provincial y un gran dinamizador de la economía.Esta mejora en cuanto a las infraestructuras complementaría el gran cambio promovido por el sector a partir de la pandemia. “Particularmente aprecio mucho el esfuerzo de reinversión que ha habido en la provincia por parte del sector y ese entendimiento de que no nos podemos quedar atrás en cuanto a desarrollo de una oferta alojativa de calidad, ocio o gastronomía de primer nivel", manifiesta Mancebo.A su vez, el responsable turístico provincial ha reconocido el gran cambio en el turismo de interior, que “ha sabido interpretar la demanda de espacios abiertos, naturales y experiencias más sofisticadas, aunque el sol y la playa siguen siendo la locomotora”. De la misma manera, según los datos ofrecido por el Patronato en este foro de debate, los picos de temporada alta y baja en la provincia se diluyen, aproximándose cada vez más a una desestacionalización real. “Esto se logra diversificando mucho la oferta, y que sea continuada y de calidad”, asegura Mancebo.