Desarticulada una peligrosa red de tráfico de drogas en la Marina Alta

La Guardia Civil ha cortado de raíz el consumo de cocaína en la comarca de la Marina Alta (Alicante), tras haber detenido a un peligroso grupo criminal dedicado al tráfico de esta sustancia y otras drogas similares. La operación, que ha sido bautizada como ‘Nobuki’, ha culminado en el arresto de todos los integrantes de la banda, así como con la incautación de la mercancía y armas de fuego, entre ellas, cañones recortados y un machete de gran tamaño.A través de diversas intervenciones de droga en la zona, que comenzaron a ser requisadas el pasado mes de febrero, las autoridades han podido desenmascarar a la cabecilla de esta red de tráfico de drogas. Para su sorpresa, la líder no era otra que una propietaria de una peluquería en Ondara. Esta mujer utilizaba su negocio para blanquear el dinero que obtenía con la venta de drogas.Según fuentes del Instituto Armado, la acusada vivía con su pareja en una zona de difícil acceso situada en el municipio alicantino de Beniarbeig. Cuando los agentes centraron sus sospechas en la peluquera y su cónyuge, iniciaron una primera fase de vigilancia cerca de la vivienda. Sin embargo, esta residencia contaba con un pequeño búnker ilegal, provisto de un sistema de vídeo, que detecta cualquier tipo de amenaza externa en el domicilio.Ni siquiera estas medidas extremas de seguridad entorpecieron el objetivo de los agentes, que lograron identificar al resto de integrantes de la banda criminal, cuya actividad se reducía a vender cocaína y drogas similares en poblaciones de Alicante como Pego, Pedreguer, Jalón, Dénia, Ondara, Orba, Vergel y Beniarbeig.

El segundo escalón: la incautación de armas y droga

Tras este primer reconocimiento, le siguió una segunda fase el anterior 25 de julio, cuando la Guardia Civil y el Equipo ROCA de Calpe procedieron al registro de tres inmuebles en la Marina Alta y la peluquería en Ondara. También participó en la redada el puesto principal de El Vergel.En estas operaciones, se intervinieron siete gramos de cocaína; 280 gramos de hachís; 80 plantas de marihuana; 866 gramos de cogollos de cannabis; así como varias piezas de material para el procesamiento de las drogas y dos vehículos a motor de gama media utilizados para su venta. Por si fuera poco, también se incautaron armas de fuego peligrosas, como dos escopetas con cañones recortados, un machete de grandes dimensiones y un arma larga de aire comprimido.Los detenidos, cuya edad oscila entre los 27 y los 59 años, han sido imputados por un cuádruple delito contra la salud pública, pertenencia a una organización criminal, blanqueo de capitales y tenencia ilícita de armas. Tras haber pasado por el juzgado de guardia e instrucción de Dénia, se ha decretado la puesta en libertad de todos ellos, aunque con medidas cautelares.