El acceso a la vivienda es actualmente el principal problema en España. Una crisis generacional que afecta particularmente a los jóvenes y que en la ciudad de Alicante comienza a alcanzar cotas inasumibles. Desde la pandemia, el precio del alquiler no ha hecho más que crecer, registrando récords de forma mensual. De hecho, en el pasado mes de septiembre el precio medio por metro cuadrado rozaba ya los 12 euros, un 12,1% más que en el mismo periodo del año anterior y cerca del doble que antes de la crisis de 2008.
Este aumento incontrolado, agravado por la proliferación de pisos turísticos, dificulta que muchas personas se puedan permitir una vivienda digna. Una situación que no solo complica el acceso al alquiler, sino que también convierte en una quimera ahorrar con la intención de adquirir una vivienda en propiedad en el futuro. La combinación de salarios paupérrimos y alquileres disparados ha creado una emergencia habitacional en la que muchos jóvenes ven truncada la oportunidad de emanciparse en condiciones óptimas.
En este contexto, Alicante será el escenario este sábado 19 de octubre de una protesta organizada por la plataforma ‘Alicante, ¿dónde vas?’ y el Sindicat de Barri de Carolines, con el lema "Casas para vivir. Por el derecho a la vivienda, la defensa del territorio y contra la turistificación". La manifestación, que se suma a otras dos protestas en València, partirá a las 19 horas desde la estación de tren y concluirá en la Plaza del Ayuntamiento. El objetivo es visibilizar la “grave situación” que atraviesan miles de alicantinos y alicantinas debido a la escalada de precios del alquiler y la falta de control sobre las viviendas turísticas.
Frenar la especulación
Salva Cobo, uno de los portavoces de la plataforma, ha sido contundente a la hora de valorar los motivos de la protesta. "Hemos decidido volver a salir a las calles para visibilizar que los problemas que acarrea la turistificación están afectando gravemente el acceso a la vivienda", ha declarado a preguntas de este medio. La proliferación de pisos turísticos —que el Ayuntamiento ya ha anunciado la intención de reforzar su inspección— ha generado un aumento desmesurado de los precios, y según Cobo, "esto tiene efectos catastróficos para quienes tratan de acceder a una vivienda en alquiler".
En este sentido, la plataforma canaliza el descontento general de la ciudadanía con las políticas habitacionales. Así, la manifestación busca denunciar esta situación y exigir a las administraciones que implementen “medidas urgentes” para frenar la especulación con la vivienda. "La ley de vivienda promulgada por el PSOE y Podemos ha demostrado ser absolutamente ineficaz. No protege a la ciudadanía de los abusos en los alquileres de temporada ni del impacto de los pisos turísticos", asegura Cobo, quien también menciona que los propietarios están utilizando vacíos legales para incrementar los precios sin control.
Por su parte, María Cueva, otra de las portavoces de la plataforma, también hace un llamamiento a la acción ciudadana y rechaza la idea de que la solución sea construir más viviendas. "Nos dicen que hay que construir más, pero no queremos otra burbuja inmobiliaria. Hay bastantes viviendas vacías que pueden ser utilizadas", afirma Cueva. En concreto, y según datos aportados por la propia plataforma, solo en la provincia de Alicante existen 209.000 pisos vacíos, concentrados en localidades como Torrevieja y Orihuela, así como en la capital alicantina.
Aumentar la oferta de vivienda
El Ayuntamiento de Alicante, a través de su alcalde Luis Barcala, anunció en el Debate sobre el Estado de la Ciudad un plan de acción que busca ampliar el parque público de viviendas. Barcala avanzó que uno de los principales objetivos de la legislatura es "paliar las dificultades para el acceso a la vivienda" y el consistorio está trabajando en varias líneas de actuación para impulsar la construcción de unas 6.000 viviendas en diferentes barrios de la ciudad, de las cuales aproximadamente 2.000 serán de carácter social.
Entre los sectores de desarrollo, destacan áreas como el PAU 9, donde se crearán 1.000 nuevas viviendas, de las cuales 300 estarán destinadas a protección pública. Esta zona, proyectada en las Lomas de Garbinet. Por su parte, La Albufereta albergará la construcción de 1.420 viviendas: 1.278 libres y 142 de protección pública. En el sector del PAU 5 en Playa de San Juan se levantarán 465 viviendas, y en el PAU 3, situado al norte del plan parcial de La Albufereta, está previsto el desarrollo, en el plazo de tres años, de 1.642 viviendas, de las cuales 492 serán protegidas.
Además, el alcalde destacó otros proyectos como la rehabilitación de 14 viviendas de alquiler asequible en el barrio de San Gabriel y la construcción de otras 32 de carácter social en San Blas. Asimismo, esta misma semana el Ayuntamiento ha anunciado la reactivación de las obras de 15 viviendas para alquiler joven en El Portón, una medida que va de la mano con la implementación en 2025 de un nuevo bono de alquiler joven, que otorgará 350 euros de ayuda directa. Sin embargo, los detalles sobre los requisitos de este bono y su compatibilidad con las ayudas estatales aún están por determinar.
Aun así, desde ‘Alicante, ¿dónde vas?’ consideran que el enfoque del consistorio no aborda la raíz del problema. "No se trata solo de construir más viviendas, se trata de garantizar que estas viviendas sean accesibles y estén libres de la especulación turística que ha dominado el mercado inmobiliario", insiste María Cueva. La manifestación de este sábado supone un grito de auxilio de una generación “ahogada” por el alquiler para exigir políticas más eficaces que garanticen que la vivienda deje de ser un lujo y vuelva a ser un derecho básico.