El bolsillo de los vecinos y vecinas de la ciudad de Alicante deberá hacer frente al aumento de la tasa impositiva por la recogida de basuras a partir de enero del próximo año. Así lo ha confirmado la Junta de Gobierno tras dar luz verde al proyecto de la nueva Ordenanza Fiscal reguladora de la Tasa de Recogida, Transporte y Tratamiento de Residuos Sólidos Urbanos. Una iniciativa que deroga la anterior norma que databa de diciembre de 2015 y que busca cumplir con las obligaciones impuestas por la normativa de la Unión Europea, que obliga a equiparar el coste del servicio con lo que realmente pagan los ciudadanos.
Se trata de una revisión fiscal que ya se ha empezado a aplicar en ayuntamientos de toda España y que Manuel Villar, vicealcalde, portavoz municipal y concejal de Limpieza y Gestión de Residuos, ha recordado en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno que Alicante se trata de la segunda ciudad española “con la tasa de basura más baja”. Una realidad que desaparecerá a partir del 1 de enero de 2025 con incremento de un impuesto que podría llegar a multiplicarse hasta por cuatro en algunos casos.
Actualmente, una vivienda de poco más de cien metros cuadrados paga un mínimo de 22,72 euros, pero bajo la nueva ordenanza este importe podría verse incrementado en función de “criterios técnicos” que incluyen el tamaño y el valor catastral de los inmuebles. Así, la nueva fórmula abandona el criterio de zonificación geográfica y se centrará en el valor catastral y la superficie de las viviendas, oficinas y establecimientos comerciales, por lo que muchas propiedades notarán un aumento considerable en sus recibos.
El vicealcalde insiste en que esta actualización responde a la exigencia de la normativa europea que obliga a que las tasas cubran el coste real de la gestión de residuos, desde la recogida hasta el transporte y tratamiento, lo que en muchos casos va a representar un incremento sustancial para los alicantinos y alicantinas. Sin embargo, el marco europeo también recomienda compensaciones por la colaboración ciudadana en la recogida selectiva de residuos, que en Alicante alcanzarán una reducción de hasta el 20%.
Bonificaciones por colaboración ciudadana
Aunque el aumento de la tasa es la medida más destacada, el Ayuntamiento también ha incluido en la nueva ordenanza un sistema de bonificaciones y exenciones como incentivo a la colaboración ciudadana en la recogida selectiva. Por primera vez, los ciudadanos que utilicen la tarjeta electrónica o la aplicación ‘Tú haces Alicante’ para depositar residuos en los contenedores se recogida selectiva, que se ya se han implantado en los distintos barrios de la ciudad, podrán beneficiarse de una reducción de hasta el 20% en el recibo de la tasa.
Para acceder a la bonificación máxima, los vecinos deberán utilizar la tarjeta al menos cuatro veces al mes durante diez meses del año. Si este requisito tan solo se cumple durante ocho meses, la reducción será del 15%, mientras que si se cumple durante cinco meses la bonificación será del 10%, y del 5% si se usan estos contenedores durante tres meses. Este sistema tiene como objetivo incentivar el reciclaje y promover prácticas más sostenibles entre los residentes de Alicante, aliviando parcialmente el impacto del aumento de la tasa.
Impacto para comercios
Además de las viviendas particulares, el incremento en la tasa también afectará a establecimientos comerciales, bares, cafeterías y grandes generadores de residuos, como centros comerciales. En estos casos, la nueva ordenanza, que todavía debe ser aprobada de manera definitiva en sesión plenaria, contempla un sistema de tarifas ajustadas con un coeficiente corrector en función de la generación de residuos, la separación de los mismos, la afluencia de público de la vía y, en el caso de los locales con terraza, el uso de veladores.
Para estos negocios, las tarifas también pueden aumentar significativamente, pero aquellos que implementen medidas de reciclaje podrán acogerse a bonificaciones similares. El objetivo final de esta reforma es lograr que el coste de la gestión de residuos sea más sostenible y refleje el verdadero impacto económico de la recogida y tratamiento, al tiempo que se premia a aquellos que colaboren en reducir la cantidad de residuos y reciclar de manera efectiva.
Aún así, el grupo socialista en el Ayuntamiento de Alicante se muestra escéptico con respecto a la subida de la tasa de residuos y ha destacado que afectará especialmente a los colectivos más vulnerables y a los barrios con menos recursos. “Han suprimido cualquier criterio de progresividad de la tasa en materia de metros cuadrados”, ha señalado el concejal Raúl Ruiz. “Lo que más nos preocupa —ha continuado— es que existen barrios con una elevada afluencia turística que tienen mucha más cobertura que los barrios más humildes, que no cuentan con un servicio de recogida óptimo”.