Alicante prepara para un cambio visible en su paisaje urbano: mil árboles nuevos cada año dentro del nuevo contrato de conservación y mantenimiento de las zonas verdes de la ciudad. El Ayuntamiento ha aprobado en Junta de Gobierno la licitación para la gestión de este servicio con un presupuesto de 44,7 millones de euros para los próximos cuatro años,
El proyecto, que se prevé que esté operativo en 2026 tras la conclusión del actual contrato en diciembre de este año, llega acompañado de una promesa de transformación: una ciudad más verde, más cuidada y con una gestión más sostenible. “Alicante crecerá en zonas verdes y en capacidad para mantenerlas”, afirma el concejal del área Rafael Alemañ.
El pliego contempla un aumento anual de casi cuatro millones de euros respecto al anterior acuerdo —de 7,3 se se pasa a 11,2 millones— y la obligación de aumentar el personal con la incorporación de 20 operarios más cada ejercicio para atender los nuevos espacios ajardinados. “Queremos que los parques y montes urbanos sigan siendo espacios vivos y en expansión, y que se mantengan con el cuidado que merecen”, señala Alemañ.
Un contrato dividido en tres lotes
La licitación se estructura en tres bloques. El primero, con un presupuesto de 41,9 millones de euros, incluye el mantenimiento general de parques, jardines y sistemas de riego. Es el lote principal y absorberá la mayor parte de la plantilla: más de 170 trabajadores, entre técnicos, encargados y personal operativo. Cada año se sumarán 20 empleados —diez oficiales y diez auxiliares de jardinería— conforme se incorporen nuevas zonas al servicio.
El segundo lote, destinado al cuidado de las áreas forestales urbanas y periurbanas, contempla un refuerzo en el número de brigadas: de tres a cuatro equipos. Estos se encargarán del mantenimiento de montes como el Benacantil, la Serra Grosa, Orgegia, el Tossal o el Cabo de la Huerta. Su presupuesto asciende a 1,8 millones de euros para los cuatro años.
El tercer lote, con un importe de 997.000 euros para los cuatro años del contrato, se reserva a centros especiales de empleo. Este grupo gestionará el corredor verde de la Vía Parque —entre Gastón Castelló y la avenida de Novelda— y los jardines de Benisaudet, continuando una colaboración que se mantiene desde el contrato anterior.
Refuerzo de plantilla y nuevas áreas verdes
El nuevo contrato prevé una plantilla inicial de 170 personas en el lote principal, entre directivos, ingenieros, encargados, administrativos y personal operativo. A ellos se sumarán los 23 jardineros municipales, con lo que el conjunto de trabajadores dedicados al mantenimiento de zonas verdes en la ciudad de Alicante rondará las 200 personas, según los datos del consistorio.
El plan contempla, a su vez, un aumento anual de 20 operarios hasta alcanzar el número necesario para cubrir la expansión prevista de los espacios verdes. En la actualidad, Alicante dispone de más de tres millones de metros cuadrados de zonas verdes y unos 75.000 árboles en calles y plazas. La cifra crecerá con la previsión adelantada por el Ayuntamiento para plantar en torno a mil ejemplares anuales en el nuevo pliego.
Además de la plantación de nuevos árboles, el contrato incluye tareas complementarias como la reparación de mobiliario urbano, vallados, barandillas y pavimentos en parques, así como el mantenimiento de instalaciones deportivas y la red de riego. También contempla actuaciones específicas, como el suministro anual de 15.000 cañas para la Romería de la Santa Faz o la instalación de 20 abetos de gran tamaño para la Navidad.
También contempla el cuidado de 6.500 m2 de parterres, 540 maceteros distribuidos por la ciudad y la conservación de espacios emblemáticos como los parques de Lo Morant, El Palmeral, Juan Pablo II, La Ereta, La Marjal o Pedro Goitia. El contrato incorpora, asimismo, el mantenimiento de la isla de Tabarca, el castillo de Santa Bárbara y los montes periurbanos.
Las brigadas forestales, compuestas por siete operarios cada una, se encargarán de la limpieza, conservación y control de vegetación en enclaves como Serra de San Julián, Colmenares, San Blas, Villafranqueza, Porquet, Barranc de l’Infern o Monnegre. “Este contrato nos permitirá consolidar un servicio esencial y garantizar que Alicante siga ganando zonas verdes cada año”, concluye Alemañ.