Los trabajadores de los autobuses interurbanos de Alicante consuman su advertencia y convocan una huelga indefinida a partir del próximo 10 de junio. El paro llega, aseguran desde el comité, después de meses sin recibir ninguna notificación oficial por parte de los responsables de la Consellería de Transportes sobre la resolución del nuevo plan de servicios; tampoco después de la huelga que ya se estaba llevando a cabo en los nocturnos. “La implantación era inminente en septiembre de 2023 y nueve meses después continuamos con el mismo servicio precario”, argumentan fuentes sindicales. Tal y como avanzó este diario, desde el sindicato mayoritario CGT denuncian que están “hartos de escuchar siempre la misma cantinela” después de un año del “compromiso adquirido” por la Dirección General de Transportes de la Generalitat para resolver el conflicto en el transporte metropolitano de Alicante en mayo de 2023. Sin embargo, no se ha producido ningún avance y la situación es “inadmisible”, aseveran desde el comité. “Los usuarios son los grandes perjudicados de las grandes deficiencias con buses saturados, esperas interminables, servicios insufribles…”, subrayan en un comunicado. Aunque otra de las peticiones de los trabajadores pasa por la instalación de aseos portátiles en las cabeceras de Alicante, y en un primer momento desde el comité se buscó una fórmula que afectará únicamente a la capital alicantina, al tratarse de un paro convocado por la “paralización” del plan de servicios, finalmente las afecciones serán en el conjunto de la red del transporte metropolitano. En este sentido, las principales líneas afectadas por la huelga son las que conectan con las poblaciones de El Campello (Línea 21), Sant Joan y Mutxamel (Línea 23) y San Vicente del Raspeig (Línea 24).
Sin plan de emergencias
Los trabajadores manifiestan la “pasividad y poca celeridad” de la entidad autonómica tras su ‘ok’ a la propuesta planteada por la empresa concesionaria para poner en marcha un plan de emergencia para aumentar de forma provisional el servicio y, así, mitigar unas deficiencias que desde el comité califican de “claras y evidentes”. Una solución que debía verse refrendada también con un plan de servicios definitivo en el pliego de condiciones de la futura licitación para “adaptarlo a las necesidades de la población de la comarca”. La idea transmitida por la Conselleria, apuntan desde el comité, era tenerlo “como mucho” antes de los meses de verano, pero todavía no se ha producido ningún avance. El conflicto se agrava teniendo en cuenta que la empresa contrató más personal y aumentó la flota de autobuses para cubrir ese plan de emergencia. “En enero se incorporaron trabajadores con unas condiciones de jornada parcial y la promesa de un contrato a jornada completa con la entrada en vigor del plan”, expusieron a Alicante Extra desde el sindicato para denunciar una demora que está siendo “insostenible en el tiempo” para esos trabajadores. Es por ello que desde el sindicato convocan esta huelga indefinida a partir del próximo 10 de junio para “presionar” y que, de esta forma, se agilicen los trámites necesarios para que se ponga en marcha el plan de emergencias provisional. Por último, el comité lamenta que se deba llegar a esta situación “extrema” que afecta principalmente a las personas usuarias de las líneas de autobús y espera que en las próximas semanas se produzca algún avance “real” por parte de la Conselleria que permita pensar en la posibilidad de desconvocar la huelga.