El Mercado Central es uno de los emblemas de la ciudad de Alicante. El edificio centenario, situado en el corazón de la ciudad, sufrió los estragos de la Guerra Civil, pero a lo largo de su longeva historia siempre ha sido el punto neurálgico del comercio de proximidad en la capital alicantina. El mercado de abastos alberga más de 50 puestos de carne, pescado, fruta, verdura y multitud de productos frescos. La estructura se ha ido adaptando al paso de los años, y ahora el turno pasa por la modernización de los aseos.
En este sentido, el Ayuntamiento de Alicante ha aprobado la licitación de las obras para la reforma de los baños del Mercado Central, un proyecto que incluye la creación de un nuevo aseo accesible para personas con movilidad reducida en la planta sótano y la renovación de las instalaciones ya exitentes. La inversión prevista asciende a 60.000 euros, y el plazo de ejecución se estima en dos meses.
Así, las mejoras abarcan la instalación de un aseo adaptado en la zona de frutas y verduras del sótano, así como la sustitución de las cisternas, puertas y redes de abastecimiento de agua potable de los baños actuales. Tal y como detalla el Ayuntamiento en un comunicado, estas reformas buscan garantizar unas instalaciones actualizadas y adecuadas al alto nivel de uso diario de este espacio.
La edil responsable de Mercados, Lidia López, ha subrayado la importancia de este proyecto para el mantenimiento y modernización de los mercados municipales. "El Ayuntamiento continúa apostando por mejorar los mercados con reformas necesarias para ofrecer los mejores servicios públicos. Son espacios esenciales para la ciudadanía y su correcto estado es prioritario", ha afirmado López.
Detalles de la obra
La licitación del contrato de obra, que se lleva a cabo bajo un procedimiento abierto supersimplificado, pone énfasis en mejorar tanto la accesibilidad como la funcionalidad de las instalaciones. Entre las actuaciones más destacadas se encuentran la construcción de un nuevo baño adaptado en la planta sótano para personas con movilidad reducida y la modernización de los aseos existentes mediante la sustitución de cisternas, puertas y otros elementos que actualmente se encuentran deteriorados por el paso del tiempo.
De la misma manera, el proyecto también contempla la renovación integral de la red de fontanería, no solo en los baños, sino también en los puestos centrales de la planta baja para beneficiar tanto a los comerciantes como a la clientela. El proyecto forma parte de un plan más amplio para el mantenimiento y mejora de los mercados municipales como el de Benalúa y el de Babel, espacios que, según López, "se han convertido en un referente del comercio esencial y agentes dinamizadores de los barrios".
La obra cuenta con un plazo de ejecución de dos meses y tienen como objetivo minimizar las posibles molestias que pueda ocasionar a los usuarios mientras se llevan a cabo las reformas. El Mercado Central, con su alto volumen de visitantes diarios, es considerado una pieza clave en la dinámica comercial y social de Alicante.