Cocentaina y Muro han decidido sumar fuerzas para optar a una subvención europea de 10 millones de euros que les permita transformar espacios clave en sus municipios. Ante la barrera administrativa que impide a poblaciones menores de 20.000 habitantes acceder a estas ayudas de forma individual, los dos ayuntamientos han planteado una estrategia común con un objetivo claro: activar el desarrollo local a través de la cultura, la formación, la sostenibilidad y la recuperación urbana.
Tal y como explica Jordi Pla, alcalde de Cocentaina, la idea es "rehabilitar espacios y convertirlos en lugares llenos de vida". De este modo, asegura que "podremos retener todo el talento joven que, hasta ahora, tenía que buscarse su futuro fuera de nuestra comarca". Además, destaca que "gracias a esta unión caminamos juntos hacia un futuro compartido para nuestras poblaciones y, por supuesto, para el conjunto de El Comtat".
Por su parte, Vicent Molina, pimer edil de Muro, este plan integral para obtener fondos europeos supone para ambas poblaciones "un motor de cambio económico social y ambiental. La unión hace la fuerza y nuestro objetivo es convertir el Comtat en una comarca referente en áreas como la educación, la cultura o la generación de trabajo de calidad".
Actuaciones previstas
Cocentaina, quiere rehabilitar la antigua fábrica de Textiflok, cedida de manera gratuita al Ayuntamiento. Una actuación de gran envergadura teniendo en cuenta las dimensiones del edificio y el estado de conservación actual. La intención del consistorio es que este edificio se destine a la formación, la promoción económica y la cultura, entre otros aspectos de interés local.
Por otro lado, dentro de la política de recuperación y reivindicación del núcleo antiguo (incluyendo los barrios del Arrabal y la Vila), el Ayuntamiento contestano aspira a crear una vivienda social en este espacio con un objetivo triple: contribuir al bienestar de familias en riesgo de exclusión social, mejorar la situación de la vivienda en Cocentaina y, sobre todo, iniciar el proceso de reversión al casco antiguo.
Finalmente, siguiendo las políticas verdes puestas en marcha con la colocación de placas solares en el edificio de la biblioteca municipal y el centro social, el Ayuntamiento aspira a instalar nuevas en el edificio del Polideportivo Municipal y Textiflok. De este modo, además de reducir el gasto municipal en energía eléctrica, "ponemos la electricidad en las manos de la gente, lejos de los abusos de las grandes compañías eléctricas", subraya Jordi Pla.
En el caso de Muro, aspiran a implantar el Distrito Cultural para atraer inversiones y generar puestos de trabajo estables y de calidad. Aun así, el Ayuntamiento quiere rehabilitar la antigua fábrica de Las Caixetes, un espacio que funcionará como en el centro neurálgico donde implementar diferentes acciones de carácter formativo, medioambiental o artístico que sitúan a Muro como un referente en estas áreas.