El cambio climático está provocando un incremento generalizado de las temperaturas, afectando de manera significativa a las zonas mediterráneas como Alicante, donde las olas de calor son cada vez más frecuentes y extremas. Este fenómeno, conocido como "islas de calor urbanas", agrava los efectos en áreas densamente pobladas, aumentando los riesgos para la salud de los ciudadanos, especialmente en verano. Una realidad que obliga a las ciudades a tomar medidas para hacer frente a los episodios de calor extremo, como la implantación de los refugios climáticos para proporcionar zonas frescas.
Estos espacios están destinados a ofrecer protección a las personas durante periodos de calor o frío extremos, garantizando un ambiente adecuado para evitar los efectos del estrés térmico. Estos refugios pueden ser tanto interiores, como bibliotecas o centros comunitarios, como exteriores, en zonas sombreadas de parques o patios. Aunque no existe una regulación estatal específica que defina las características que deben cumplir, estos espacios buscan mitigar los efectos de la climatología adversa, especialmente en zonas urbanas densamente pobladas, donde estas "islas de calor" se acentúan.
Horario y ubicación
En este contexto, Alicante ha dado un paso adelante con la inauguración de su primer refugio climático, ubicado en el "Pozo 1" de los Pozos de Garrigós, una histórica instalación de aljibes del siglo XIX gestionada por Aguas de Alicante. Gracias a su morfología, este espacio ubicado en el corazón del barrio de Santa Cruz ofrece una temperatura constante durante todo el año, proporcionando un lugar cómodo en el casco antiguo para quienes necesitan resguardarse de condiciones climáticas complicadas.
Además, el refugio —que poco tiene que ver con el entramado subterráneo de la ciudad de Alicante para protegerse de las bombas durante la Guerra Civil— ha sido acondicionado con acceso a agua, electricidad, servicios públicos, internet y vegetación adaptada al entorno. El espacio también contará con una colección bibliográfica donada por el Ayuntamiento de Alicante, a través de las concejalías de Cultura y Medio Ambiente, y la Universidad de Alicante, brindando un entorno cultural para los visitantes.
Tal y como explica Aguas de Alicante en un comunicado, el refugio estará inicialmente disponible en el horario habitual del Museo de Aguas de Alicante: de martes a viernes de 10h a 14h y de 17h a 20 horas, y sábado y Domingo de 10h a 14h (horario de invierno: de septiembre a mayo); y de martes a viernes de 10h a 14:00 y de 18h a 21 horas, y sábado y domingo de 10h a 14h (horario de verano: de junio a agosto). Se evaluará, además, la posibilidad de ampliar este horario en los casos en que se decreten olas de calor.
Lucha contra el cambio climático
La puesta en marcha de este refugio climático forma parte del Plan Estratégico 2022-2027 de Aguas de Alicante, específicamente en su eje de acción dedicado a la lucha contra el cambio climático. Este plan aborda el problema desde diferentes ángulos, tanto en lo que respecta a la gestión eficiente del recurso hídrico como a la implementación de medidas indirectas que contribuyan a mitigar los efectos del calentamiento global.
Sergio Sánchez, director general de Aguas de Alicante, señala que la empresa mantiene una “escucha activa” de las necesidades de la ciudadanía, y que la creación de este refugio es una respuesta directa a la creciente necesidad de espacios seguros ante fenómenos meteorológicos extremos en la región mediterránea. “La adaptación del Museo de Aguas para cumplir esta función ha sido posible gracias a una planificación detallada y una inversión de recursos, demostrando así el compromiso de la empresa con la sostenibilidad y el bienestar social”, asegura el responsable de Aguas de Alicante.