Los trabajadores del TRAM d’Alacant han dicho basta y anuncian la convocatoria de una huelga de cara a la última semana de enero y todo el mes de febrero. Los sindicatos representados en el comité de empresa –UGT, CCOO, SEMAF y SF– exigen a la dirección de Ferrocarrils de la Generalitat (FGV) y, por tanto, a la Conselleria de Infraestructuras, que apruebe de forma definitiva las mejoras pactadas por ambas partes el pasado noviembre.
Así, los paros comienzan el próximo lunes 27 de enero y afectarán al conjunto de las líneas del TRAM, a excepción de la L9 entre Benidorm y Dénia. De esta forma, la huelga de los maquinistas se producirá en la L1, que conecta Alicante con Benidorm; L2, que une Luceros con San Vicente del Raspeig; L3, con tranvías entre el centro de la capital alicantina y El Campello; L4, que da servicio a la Playa de San Juan; y L5, entre Puerta del Mar y Plaza La Coruña.
Tal y como han detallado los sindicatos, el horario de los paros durante la última semana de enero será de 7h a 10 horas. Sin embargo, a lo largo del mes de febrero los trabajadores van un paso más allá y, además de las primeras horas del servicio (7-10), también extienden esa franja a la hora punta de la tarde, entre las 18h y las 21 horas. Una situación a la que han llegado, según apuntan en un comunicado, “cansados de esperar” a la Generalitat.
Reivindicaciones laborales
El motivo de la huelga es exigir el cumplimiento del acuerdo que FGV firmó el pasado 20 de noviembre con el comité de empresa. El documento establecía mejoras en la oferta comercial del TRAM para 2025. Entre ellas, duplicar la frecuencia entre Alicante y El Campello, que pasaría de 30 a 15 minutos; la ampliación de trenes en L2, L3, L4 y L5, o la posibilidad de cambiar la composición de trenes simples a dobles según la demanda de cada línea.
Para llevar a cabo estas mejoras, el acuerdo recogía la incorporación de nueve plazas de maquinistas y nuevos turnos de conducción. Según los sindicatos, este acuerdo, con las nuevas frecuencias del TRAM, tenía que entrar en vigor el pasado 8 de enero, pero "no ha sido posible porque la Consellería de Hacienda todavía no ha dado su aprobación" y "al parecer, la coincidencia con las fiestas navideñas no lo ha hecho posible".
Todo ello cuando recuerdan que "FGV presta un servicio público de transporte todo el año y no cierra por vacaciones". De esta forma, denuncian que la "dejadez” por parte de la Consellería “está perjudicando a los usuarios del TRAM, que ya deberían estar disfrutando de mejores frecuencias de paso”. Además, desde el comité de huelga piden disculpas por las molestias que puedan ocasionar estos paros a las personas usuarias.